Viruela del mono: las respuestas a sus preguntas

/ 28 July 2022 / Comments

A pesar de la baja transmisión en EE.UU., la viruela del mono ha dominado las noticias sobre salud más recientes. Desde el 9 de julio de 2022, se han confirmado 767 casos en Estados Unidos. También se han registrado casos en Europa, pero la viruela del mono no es nueva. La viruela del mono es más común en África Occidental y Central, donde se transmite principalmente a las personas a través del contacto con animales. Sin embargo, la novedad es que algunos de los individuos infectados no habían viajado a África, lo que sugiere que el virus puede estar propagándose. Aunque esto ha hecho reflexionar a los epidemiólogos, todavía no hay pruebas de que el virus ha sufrido cambios que lo hagan más transmisible.

El virus de la viruela del mono pertenece a la familia Poxviridae y al género Orthopoxvirus, que incluye la variola (el virus que causa la viruela), la vaccinia (que se utiliza en la vacuna contra la viruela) y el virus de la viruela de las vacas. A continuación, respondo a algunas de las preguntas más comunes que los proveedores de servicios de salud que atienden a migrantes e inmigrantes están recibiendo de los miembros de la comunidad, a partir de la información que tenemos en la actualidad. Recuerde que, al igual que en el caso de la COVID-19, la situación está cambiando rápidamente. Manténgase al día sobre la viruela del mono visitando el sitio de los CDC: Brote de viruela símica (viruela del mono) en el 2022 en los Estados Unidos.

¿Se contagia fácilmente?

En general, la viruela del mono no se contagia fácilmente entre humanos. Según los CDC, se cree que la transmisión de persona a persona se produce principalmente a través de grandes gotas respiratorias. Otros medios de transmisión incluyen el contacto directo con fluidos corporales o lesiones y el contacto indirecto con el material de las lesiones a través de la ropa o la ropa de cama contaminada, también conocidos como fómites. En EE.UU., gran parte de la transmisión se ha producido hasta ahora entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres, pero eso no significa que la enfermedad se limite a esa comunidad.

Aunque existen algunos indicios preliminares de aerosolización, esa no es una vía importante de propagación. Por lo tanto, la propagación será más lenta que la de un virus transmitido por el aire, el rastreo de los contactos será más fácil y el distanciamiento social será más eficaz.

Si bien el huésped reservorio de la viruela del mono sigue siendo desconocido, se cree que los roedores africanos desempeñan un papel en la transmisión en África.

¿Cuál es el período de incubación?

Los CDC dicen que el período de incubación típico de la viruela del mono es de 7 a 14 días, pero puede oscilar entre 5 y 21 días.

¿Qué síntomas debo tener en cuenta?

Entre los primeros síntomas que aparecen están los parecidos a los de la gripe, que incluyen fiebre, dolores y fatiga. La infección por viruela del mono también conlleva la inflamación de los ganglios linfáticos.

Posteriormente, por lo general entre uno y tres días después -aunque a veces más tarde- aparece una erupción, según los CDC. Suele empezar en la cara antes de extenderse a otras partes del cuerpo. La enfermedad suele durar entre 2 y 4 semanas.

¿Es mortal?

Se cree que la cepa de la viruela del mono de la cuenca del Congo tiene una tasa de mortalidad del 10%, mientras que la cepa de África occidental -que se confirmó en el brote del Reino Unido- tiene una tasa de mortalidad de aproximadamente el 1%.

¿Es la primera vez que llega a Estados Unidos?

En 2003, hubo 47 casos confirmados y probables de viruela del mono en personas del Medio Oriente. Todos se habían enfermado tras entrar en contacto con perros de la pradera que habían sido infectados tras permanecer cerca de animales importados de Ghana. En Estados Unidos también se produjeron dos casos relacionados con viajes en julio y noviembre de 2021.

¿Es equitativa la respuesta a la viruela del mono?

La viruela del mono no es una enfermedad nueva. Ha sido endémica en África Central y Occidental durante décadas, y seguramente desde hace más tiempo. Los recientes brotes de la viruela del mono en las naciones más ricas ponen de manifiesto las desigualdades en la respuesta de la salud pública, ya que los países más pobres carecen de los recursos y la influencia política para responder a los brotes con eficacia o para impulsar el desarrollo de vacunas y tratamientos de enfermedades que solo afectan a sus propias poblaciones. En los países más pobres también hay intereses que compiten entre sí, ya que pueden presentarse muchas enfermedades simultáneamente, y hay que priorizar los tratamientos y los esfuerzos de prevención. En los años 80, por ejemplo, la viruela del mono en África Central se vio eclipsada por otro “nuevo” virus que acaparó la mayoría de los titulares: el VIH. En años más recientes, los brotes de sarampión -una enfermedad mucho más mortal que la viruela del mono- captaron la atención de los funcionarios de salud pública que se enfocaron en su prevención a través de la vacunación. Incluso más recientemente, la pandemia de la COVID-19 ha opacado a otras enfermedades que necesitaban tratamiento y prevención a través de la vacunación. Afortunadamente, existen esfuerzos para reducir las desigualdades en el tratamiento de la viruela del mono, ya que también existe una vacuna.

¿Cuál es la vacuna contra la viruela del mono?

Según los CDC, no existe un tratamiento probado específicamente para la viruela del mono, pero se puede utilizar la vacuna contra la viruela, los antivirales y la inmunoglobulina de vaccinia.

La vacuna contra la viruela Jynneos (también conocida como Imvamune o Imvanex) también está indicada para la viruela del mono. Es una vacuna atenuada, de virus vivo, incapaz de replicarse en el cuerpo humano, que cuenta con la aprobación de la FDA.

Al parecer, el gobierno federal también dispone de una reserva de otras vacunas contra el virus de la viruela que pueden utilizarse. El gobierno de EE.UU. suspendió su programa de vacunación contra la viruela en 1972, pero se cree que las personas que recibieron dicha vacuna probablemente todavía gozan de cierta inmunidad.

Históricamente, los brotes de viruela se contenían mediante la vacunación en anillo, que consistía en identificar los casos rápidamente, aislar a los contactos cercanos y vacunar a todos los contactos en los cuatro días siguientes a la exposición, lo que suele evitar la infección, según el doctor John Ross, del Hospital Brigham and Women's. "Esta estrategia probablemente funcionaría para la viruela del mono, si los contactos aceptaran ser vacunados", dijo.

Si bien no existen antivirales probados y específicos para la viruela del mono, pueden utilizarse cidofovir y brincidofovir. Según los CDC, algunos estudios in vitro y en animales de estos compuestos han mostrado eficacia contra los poxvirus.

Otro medicamento, el tecovirimat (Tpoxx), está aprobado por la FDA para el tratamiento de la viruela en forma oral y ahora también intravenosa. En la Unión Europea, el tecovirimat también está indicado para la viruela del mono. Se ha demostrado en estudios con animales que es eficaz en el tratamiento de la enfermedad inducida por el ortopoxvirus, y los ensayos en humanos con sujetos sanos indicaron que el fármaco era seguro y bien tolerado con solo efectos secundarios menores, según los CDC.

Soy un proveedor de servicios de salud que atiende a migrantes e inmigrantes. ¿A qué debo prestar atención cuando atiendo a mis pacientes?

Es importante que los proveedores de servicios de salud -en particular los que atienden a inmigrantes que pueden haber viajado recientemente a una zona con mayor transmisión de la viruela del mono- conozcan los signos y síntomas y cómo tratarlos. Asegúrese de hacer una historia clínica completa. Se ha elaborado un SAER (situación, antecedentes, evaluación, recomendación) para guiar a los proveedores de servicios de salud sobre cómo reconocer los signos y síntomas de la viruela del mono y la manera de tratarla.

Se debe considerar la viruela del mono si se observa lo siguiente:

Exposición a un caso conocido o sospechoso de viruela del mono. El periodo de incubación es de cinco a 21 días, siendo más común de siete a 14 días.
Primeros signos y síntomas: fiebre, dolor de cabeza, dolor muscular y agotamiento. Los síntomas son similares a los de la viruela, pero la viruela del mono presentará linfadenopatía.
El sarpullido suele aparecer en la cara y se extiende a otras partes del cuerpo.

Si se sospecha un caso, ¿qué debe hacer un centro de salud?

El paciente debe ser aislado. El aislamiento debe incluir: aislamiento del aire, respirador N95 o PAPR, bata, guantes y protección ocular.

Para el control de la fuente, mascarilla (si se tolera) y mantener cubierto el sarpullido.

Pasos para la evaluación clínica del virus de la viruela del mono:

Los consultorios de atención primaria y de urgencia deben remitir a estos pacientes al servicio de urgencias más cercano y notificar al servicio de urgencias que el paciente está en camino. Esto asegurará su correcto manejo ambiental.
El paciente debe ser colocado en una sala de presión negativa.
El personal debe usar el equipo de protección personal (EPP) adecuado, que incluye respirador N95 o PAPR, bata, guantes y protección ocular.
Todo caso sospechoso debe ser reportado al Departamento de Salud.

¿Qué sigue?

Se desconoce lo que va a ocurrir en los próximos meses, pero no se espera que la viruela del mono se extienda rápidamente en Estados Unidos o en otros lugares. Como atravesamos el tercer verano con COVID-19 -mi hospital está de nuevo lleno de pacientes enfermos con COVID- la población en general sigue prestando atención a las amenazas para la salud pública que en un mundo anterior a la COVID podrían haber suscitado menos interés. Esto no quiere decir que la viruela del mono no sea preocupante; conocer los signos, los síntomas y el tratamiento es fundamental. También es importante que los proveedores de servicios de salud comuniquen a sus pacientes los datos y las proyecciones para ayudar a responder a sus preocupaciones y ofrecer una imagen realista de este brote. Preparadas con información fidedigna, protocolos claros para el establecimiento de la salud y tratamientos eficaces, nuestras comunidades pueden mantenerse seguras y sanas frente a enfermedades infecciosas como la viruela del mono.