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El cierre de la frontera pone en peligro la salud de los migrantes: Posición oficial de la Red de Proveedores de Servicios de Salud para Migrantes

A person being processed at the border.

Recientemente, el presidente Biden firmó una orden ejecutiva que restringe significativamente la posibilidad de que las personas que lleguen a la frontera sur de los Estados Unidos soliciten asilo. Según la orden, no se aceptará ninguna solicitud de asilo al día, una vez que se haya alcanzado la cifra límite de 2.500 encuentros con migrantes en los puertos de entrada oficiales. Quienes insistan en pedir asilo una vez alcanzado este límite y no expresen voluntariamente el temor de regresar a sus países de origen, se les podría prohibir volver a entrar a los Estados Unidos por cinco años.

La Red de Proveedores de Servicios de Salud para Migrantes (MCN por sus siglas en inglés) cuenta con 40 años de historia al servicio de la salud y el bienestar de los inmigrantes y solicitantes de asilo recién llegados. Hemos atendido a miles de personas que han llegado a la frontera sur de los Estados Unidos. Muchos tienen necesidades relacionadas con su salud física y mental después de huir del peligro, la violencia, la persecución o las catástrofes en sus países de origen; muchos otros han experimentado el trauma y el agotamiento adicional de viajar hasta la frontera por días, meses o años.

Las políticas de inmigración en la frontera del país deben respetar, como mínimo, los derechos básicos humanos y garantizar que no se cause más trauma y daño a quienes solicitan asilo. Esta política no cumple con estos derechos básicos.

“Todo el mundo tiene derecho a solicitar asilo cuando su vida corre peligro. Esta política rechaza ese derecho humano y jurídico básico,” afirmó Kim Nolte, MPH, directora ejecutiva de MCN.

La excepción de esta política, en la que se permite a los menores no acompañados solicitar asilo, no hará más que empujar a los padres a tomar la decisión de enviar solos a los niños. Otros podrían intentar cruzar la frontera sin permiso por rutas más remotas y peligrosas en un intento desesperado de evadir la norma.  

“Los solicitantes de asilo están pidiendo nuestra protección. Esta política hace todo lo contrario, amenazando con poner en peligro a las personas, dejándolas expuestas y a riesgo en las ciudades fronterizas, y llevando a los padres a enviar a sus hijos solos en un intento desesperado por encontrar seguridad en los Estados Unidos", afirmó Nolte. 

La migración es difícil y expone a las personas a riesgos nuevos y significativos que van desde el estrés por calor, la deshidratación, la exposición a enfermedades, hasta la explotación y el tráfico de personas. Los migrantes que tienen intención de pedir asilo luchan por encontrar suficientes recursos para cubrir sus necesidades de salud, incluyendo la atención básica mientras se dirigen a la frontera. Aunque las políticas y los sistemas fronterizos actuales del país apenas son suficientes para la migración de hoy, cualquier avance legal y normativo debe tener en cuenta en primer lugar el bienestar básico, la dignidad y los derechos humanos de las personas vulnerables que solicitan protección.  

Aquí hay más información sobre el trabajo que hace MCN en la navegación virtual de casos de solicitantes de asilo vulnerables, como las embarazadas y los niños con necesidades de atención especializada. Lea sobre los problemas de salud a los que se enfrentan los inmigrantes.